EL FAMOSO SíNDROME UROLÓGICO FELINO (FUS)

EL FAMOSO SíNDROME UROLÓGICO FELINO (FUS)

Los terminos FUS (Feline Urinary Syndrome) y FLUD (Feline Lower Urinary Tract Disease) se utilizan para referirse a los trastornos urinarios que producen en el gato dificultad para orinar.

Comportamientos observados en casa:

-Dificultad para orinar.

– El gato orina en sitios inapropiados, fuera o alrededor de la caja de arena.

-El gato va muchas veces a la caja y orina en pequeñas cantidades.

-Orina con sangre.

-Lamido excesivo de la zona del pene.

-Vocalización (maullido).

Es común que el propietario confunda estos comportamientos con dificultad para defecar.

Factores predisponentes:

  • Gatos entre 2 a 6 años.
  • Más común en machos.
  • Estilo de vida sedentario.
  • Alimentación inadecuada.
  • Gatos castrados.
  • Poca ingesta de agua.
  • Enfermedades concurrentes (virus de leucemia felina, virus de inmunodeficiencia felina u otros).

Causas del FUS:

Cistitis idiopática felina o Cistitis intersticial: (50 – 70%): es la inflamación de la pared de la vejiga sin causa conocida.

-Cálculos en el tracto urinario (15- 21 %): la composición más frecuente de estos urolitos en los gatos son estruvita (49%) y oxalato cálcico (41%).

Tapones uretrales (15 – 21%): es un aglomerado de diferentes compuestos (mucoproteinas, albumina, globulinas, coágulos de sangre, células, cristales) que obstruye el tracto de salida de la orina. Se cree que dicho aglomerado se desprende de la pared de la vejiga en presencia de inflamación secundaria a enfermedad del tracto urinario.

Defectos anatómicos (10%): son alteraciones hereditarias o procesos adquiridos que interfieren con el desarrollo y crecimiento del tracto urinario.

-Problemas de comportamiento (9%): generalmente asociados a cambios en la rutina del gato: mudanzas, viajes, muerte de un familiar, problemas familiares, adquisición de una nueva mascota, nacimiento de un nuevo integrante en la familia e inclusive remodelación de la casa, entre otros.

-Infecciones del tracto urinario (1-8%): son infrecuentes, pueden desarrollarse tras la manipulación del pene (sondeos) o secundarias a enfermedades como la diabetes, insuficiencia renal crónica, hipertiroidismo e inclusive por cálculos o neoplasias.

Tumores (1-2 %): por desarrollo de masas que obstruyen la salida de la orina.

Historia clínica y examen físico:

-Todos los datos que el dueño del gato pueda aportar pueden llevar a un diagnóstico y causa más acertada del problema.

-Al examen físico el veterinario puede observar una inflamación del prepucio y del pene así como la vejiga pletórica (dura) a la palpación.

-Aproximadamente el 12% de estos pacientes presentan un cuadro clínico severo que requiero atención inmediata.

Pruebas diagnósticas:

  • Hematología y química sanguínea: es indispensable medir los valores de urea, fósforo y creatinina como indicativo de la funcionalidad de los riñones.
  • Urianalisis: para evaluar Ph de la orina, densidad, presencia de cristales e infección.
  • Ecosonograma abdominal: dicha prueba es un factor determinante para el diagnóstico y el pronóstico del paciente.
  • Entre otros…

Tratamiento:

Va a depender de la condición del paciente. Si se requiere un sondeo urinario estos pacientes deberían recibir soporte de fluidos vía intravenosa y mantenerse con un catéter urinario 48 a 72 horas.

En gatos que presentan obstrucciones recurrentes está indicada la uretrostomia que es una cirugía que busca agrandar la uretra, sin embargo, ésta no soluciona el problema de fondo.

El tratamiento en casa va dirigido a controlar las posibles causas y tratar los síntomas del gato.

Recomendaciones:

  • Existen dietas formuladas específicamente para gatos con estas patologías.
  • Aumentar la ingesta de agua:
    • Se recomienda el uso de filtros o fuentes que hacen más llamativas el agua al gato.
    • Colocar una gota de leche por cada vaso de agua.
  • Disminuir factores de estrés.
  • Enriquecimiento ambiental.
  • Cuando convivan varios gatos está indicado colocar una caja de arena adicional al número de gatos totales.
  • Si su gato incrementa el número de veces que va a la caja diríjase a su veterinario.

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